En materia de comunicación, la digitalidad vino a cambiarlo todo. Durante el transcurso de los últimos años se comprobó que, efectivamente, la tecnología puede amplificar la llegada de un mensaje tres veces más rápido.
En este sentido, es tarea de las empresas reconocer las herramientas que pueden serles útiles para lograr un mayor alcance a un público amplio. Y para eso, juega un papel importantísimo uno de los elementos clave de cualquier empresa u organización que ofrezca productos y/o servicios: el catálogo interactivo.
Hace poco tiempo atrás, los negocios todavía utilizaban los catálogos físicos que ofrecían a sus clientes de diversas maneras: en las tiendas, a la hora de efectuar una compra, en la calle o por correo. Aunque aún muchas empresas hacen uso de esta herramienta, lo cierto es que ya no es tan común, porque hoy en día existe el catálogo interactivo.
¿De qué se trata? Nada más y nada menos que de aquel viejo catálogo que se entregaba como revista o folleto, pero traducido a los códigos digitales, con la finalidad de que los usuarios y clientes puedan interactuar con su contenido.
Posiblemente, te estés preguntando cómo son los catálogos interactivos. La realidad es que no son muy diferentes de sus predecesores, teniendo en cuenta que, de base, son intangibles. Pueden enviarse por mail a modo de newsletter, por WhatsApp o sms, o cargarse en una página web. Cualquiera de estos métodos ayudan también al posicionamiento de la empresa, pero de eso hablaremos más adelante.
Contemplando el hecho de que en la actualidad la mayoría de las personas vive utilizando dispositivos móviles, (smartphones, computadoras, tablets) no es de extrañar que las nuevas estrategias de comunicación tengan que adaptarse a esta realidad. Por este mismo motivo, los catálogos interactivos ayudan a impulsar el alcance de una marca hacia sus potenciales compradores.
Se pueden diseñar de muchas maneras, adaptándolo a las necesidades de cada comercio. Sin embargo, hay algunos elementos que son clave y no pueden faltar en tu catálogo interactivo. Las imágenes, los videos y los textos diferenciados hacen una gran diferencia, porque consiguen llamar la atención de los usuarios y dirigirla hacia el objeto protagonista: el producto.
Claro que, en términos de diseño, hay muchas posibilidades para explotar, pero te aconsejamos que sigas algunos patrones para garantizar un éxito mayor:
Una vez que tengas tu catálogo interactivo, compartirlo en las Redes Sociales puede ayudarte enormemente a darle difusión. Instagram o Facebook son dos de las redes más utilizadas con este fin, porque compartir un link es tan sencillo como pegarlo y publicarlo en una publicación o una historia.
¿Querés saber más? Te contamos cómo puede beneficiarte.
Ahora que ya sabés por qué, puede que te estés preguntando cómo. Como te mencionamos antes, compartir tu catálogo en Redes Sociales es muy sencillo y se logra en tan solo unos pasos, pero es importante prestar atención a la utilidad de este recurso.
Recomendamos prestar especial atención al mensaje que se publica junto con el catálogo, ya que esto puede ser clave para ganar la atención de los usuarios y garantizar que realmente interactúen con el contenido. También podés dejar fijada la publicación donde está el catálogo.
De esta manera, cada vez que los usuarios ingresen a tu perfil, uno de los primeros contenidos con los que se encuentren va a ser el catálogo, más allá de que hayas seguido subiendo publicaciones después.
Cuando un usuario ingresa a tu perfil de Instagram, por ejemplo, se encuentra con lo que podríamos llamar la cara de tu negocio. Por este motivo es tan importante personalizar correctamente tu perfil en las Redes Sociales, con la información completa y redactada de forma clara.
El tono que le des dependerá de tu empresa y de cómo quiera comunicarse con sus clientes, pero lo demás tiene que estar expuesto para que los usuarios lo vean y se lleven una buena impresión.
Compartir el link en tu biografía va a hacer que esto sea una de las primeras cosas que el comprador vea y sienta ganas de ingresar para ver qué le estás ofreciendo.
Cuando compartas tu catálogo en publicaciones de Instagram o Facebook, recordá hacer uso de hashtags y keywords, ya que estos te van a ayudar a llegar a una mayor cantidad de gente que busca lo que estás ofreciendo. También podés etiquetar a clientes para que estos compartan a sus conocidos.
Como mencionamos más arriba, compartir el link del catálogo en historias es de mucha utilidad para potenciar la llegada de tu contenido. Si bien las historias desaparecen al cabo de 24 horas, pueden ayudarte a posicionar tu marca en Instagram.
Muchas veces, Instagram sirve como una carta de recomendación. A menudo otros usuarios suben a stories el contenido o las marcas que les gustan, dando a conocer nuevos productos a sus seguidores. Si esto sucede y etiquetan a tu empresa, asegurate de compartirlo en tus propias historias y, si no las querés perder, podés dejarlas en el apartado de “Destacadas”. De esta manera, serán tus clientes quienes te estén recomendando.
Ahora que tenés esta información, ya tenés lo que se necesita para empezar. Si querés saber dónde hacer un catálogo interactivo para tu página o para compartir en PDF, en Peiperless te ofrecemos una manera fácil y atractiva de mostrarle a tus clientes todo lo que tenés para ofrecer.
Si tenés dudas, podés acceder a nuestra demo y ver cómo hacemos para darte las mejores soluciones. Priorizamos la accesibilidad y la velocidad para que dispongas, de manera muy sencilla, de un catálogo personalizado que cuente con las secciones necesarias para exponer tus productos. Desde carrito de compras, hasta gifs, imágenes, animaciones e íconos para mostrar a tus clientes distintas opciones.
¿Qué estás esperando? ¡Contactanos!